El enfoque convencional de los medios de comunicación ‣ Bitácora de Melisa Aguilar

Bitácora de la sesión del 22 de mayo de 2012. Texto estudiado: Stuart Hall, Sin garantías, Trayectorias y problemáticas en estudios culturales, Lima/Popayán/Bogotá/Quito, Envión, 2010, capítulos 6 y 7, pp.133-192. Versión de Melisa Araceli Aguilar Quevedo.

Ronda de preguntas

1. ¿A que se refiere el autor con que la determinación “es la única base de un ‘marxismo sin garantías finales’” y qué es una “determinación sin clausuras garantizadas”?

La economía es la determinación en última instancia en la interpretación básica/ortodoxa del marxismo. Stuart Hall se refiere entonces a la determinación de la economía sobre la política, pero sin una garantía final. La economía fundamenta las ideas que tenemos sobre la democracia, sin embargo, no es una determinación directa; pasa por la clase social, que es la determinación en última instancia y fundamenta quiénes somos. La clase social requiere una conciencia no-inmediata, es decir, requiere una mediación que implica que el sujeto que quiere llegar al conocimiento de sí, pasa por las conciencias de otros. Tal es la función del lenguaje, que se forma de signos (significantes) y significados: el conocimiento ya no tiene garantías que me digan quién soy yo y, por ende, toda lucha social no tiene un fundamento último.

2. ¿Por qué no pueden las ideologías volverse “materialmente efectivas a no ser que y hasta que pueda ser articulada al campo de fuerzas políticas y sociales y a las luchas entre las diferentes fuerzas que están en juego?¿Pueden serlo sólo presionando en el orden político?

No basta con una presión en el orden económico para conseguir un objetivo. Necesitan que la sociedad esté convencida también.

3. ¿Qué es la “uniacentualidad”? Es darle significado en una primera instancia al estar dentro de alguna clase. Para ejemplificar, se usa lo que decía Marx: si trabajo en una fábrica, por lo tanto soy proletario; debe haber un cambio de condición en la conciencia ¿por qué no sucede?

4. ¿Qué es la práctica de clausura? Según Marx, es el modo de interpretar lo único: el mejor modo de economía es el libre intercambio de mercancías.

Exposición

Para comenzar con el texto asignado a la clase se realizó la pregunta de cómo se emplea el concepto de ideología en este. El problema es el consentimiento, ¿por qué las masas dominadas consienten en su dominación? Para responder a esto, el profesor utilizó el ejemplo de los candidatos a la presidencia en 2012. Según López Obrador, los que votaron por Peña eran de las comunidades más pobres, ¿por qué? Por su condición vulnerable, es decir, que su condición económica incidió en la campaña. Pero esta respuesta no explica el fondo del asunto, dejaría abierto que la solución para revertir esta tendencia sería la compra de votos. ¿Por qué las masas dominadas consienten la compra de votos? ¿Por qué surgen las ideas sociales? Hay algo más que influye.

La ideología es el conjunto de ideas que, de alguna manera, sujetan las mentes de las masas. Es toda forma organizada de pensamiento social, que no es un reflejo de la condición económica, sino que hay una distorsión. La ideología no es la falsa conciencia porque sus ideas sean falsas, sino por la insuficiencia de la explicación. Hall lo explica a través del Libre Mercado, donde este se trata como la mejor de las maneras de intercambio de mercancía, porque toma una parte como si fuera un todo.

Para que este sistema económico (el intercambio de mercancías) funcione, requerimos actuar de acuerdo con ciertas ideas, que nos explican cuál es la situación y estas ideas no vienen de manera natural de la propia situación. La lucha para marcar cuál es la situación, es la lucha ideológica, que es equivalente a la lucha hegemónica.

¿Quién determina el modo en que nosotros percibimos el todo? Un factor elemental son los medios de comunicación.  Hay que explicar en qué consiste el “influir sobre”. Para esto hay varias explicaciones. La más inmediata fue la explicación de los sociólogos norteamericanos conductistas, que podríamos denominar como un enfoque convencional (analizar el “efecto” que tienen los medios de comunicación). Hay una perspectiva conductista: Los spots de televisión buscan tener un efecto. Quien paga esos spots debe estar convencido de que tendrán un efecto. Es por eso que se parte de un análisis “conductista”.

Bajo una perspectiva pluralista, en cambio, el espectador tiene opciones: los medios no influyen de manera única, sino que otros medios también inciden, de manera que la conducta final no puede ser leída como condicionada de manera exclusiva por, digamos, un anuncio. Puede incluso haber un efecto negativo, como hartarse de aquello que se está viendo, o el efecto segundo víctima (de favorecer “por lástima” a quien se encuentra en segunda posición en las “preferencias” que muestran las encuestas). El problema es que el pluralismo supone un consenso.

El enfoque convencional parte de la cultura de masas:

• Supone un desplazamiento de la “alta cultura”, a través de la “masificación”, es decir, la vulgarización.
• La vulnerabilidad de las masas a la propaganda. Las masas repiten lo que los medios les impongan.
• Desintegración de los vínculos comunitarios,consecuencia del aumento poblacional. No me interesa quién es mi vecino, los que viven cerca.

El influjo de los medios sobre la construcción de una opinión, identidad, etc. parece refutado por el pluralismo, que sostiene que las personas pueden elegir qué ver. El problema es que el pluralismo supone un consenso en cómo está pensado el todo social. Lo que hacen los medios es así reforzar el consenso.

La pluralidad de medios fortalece la idea de que podemos actuar libremente; los que no pertenecen al consenso, son anómicos, es decir, desviados de la norma social. El consenso requiere, justamente, partir del consenso. Esto es, requiere estar de acuerdo con el consenso y los medios lo refuerzan. ¿Quién y cómo define lo que pertenece al consenso? Los medios son el instrumento del refuerzo del consenso del statu quo, a pesar de que se digan contrario, porque, en esta perspectiva, cualquier agregado a los medios implica creer la idea del pluralismo.